miércoles, 27 de agosto de 2008

Viaje a Londres 4

Finalizo ya el reportaje del viaje a Londres. Recordaré los anteriores links por si alguien se ha perdido algo


Bueno, era el día de la salida (oooh). Nos levantamos tarde (después de reventar a Babé y a Alejandro pateando la ciudad, creo que se lo merecían). Atención a la manera de despertarse que tenía Alejandro todas las mañanas.

Llegamos a la estación de metro donde un vendedor quiso que le compráramos un jabón a base de baba de caracol o algo así. Nos hizo lavarnos las manos (preguntándonos si nos lo habíamos lavado en el hotel) y nos dispusimos a refregarnos las palmas con aquel producto inmundo. Efectivamente sacó roña y se nos quedaron las manos como el culo de un niño chico. Pero el precio era prohibitivo (¡con esto podrá limpiarse todo un año!). En fin. Maletas para la estación Victoria.

Decidimos hacer tiempo, y como estábamos en Westminster (sí: estábamos en Londres y dentro de Londres hay un pequeño reducto que es Westminster) decidimos visitar el ayuntamiento.
Seguimos caminando a ver dónde nos dirigían nuestros pasos y fíjate tu por donde, nos encontramos de bruces con la catedral católica de Westminster (catedral de los ingleses y los galeses católicos).
Entramos en ella y nos sorprendió "algo" que comentaré más adelante. Ahora fotos.

























Nos dio la sensación que los británicos habían confundido el catolicismo con el arte bizantino. Debe ser muy chocante para un católico inglés (o galés) venir a sevilla y ver una catedral gótica católica.

Bueno, pues vuelta a la estación. Nos montamos en el tren (con dos canis que lo único que hacían era comer y mirarse en el espejo)y de ahí a esperar la salida del avión a Sevilla, que (sí, esta vez) tomamos felízmente.



Y llegada a Sevilla con su "maravilloso" calor. Menuda bofetada nos dio nada más abrir las puertas del avión. Manda webos.


Y para terminar una cosa que vimos en la catedral y que me hizo mucha gracia, jejeje. Estoy en todas partes.

miércoles, 20 de agosto de 2008

Viaje a Londres 3

Prosigo con el minireportaje del viaje a Londres. Mini reportaje que ya tuvo sus precedentes en


He tardado un poco en postear algo porque estoy echando "unas horillas" en el curro para poder así cambiar el suelo de la cocina. Este también va a ser un poco tocho, advierto.


Nos levantamos "temprano" y fuimos directos al British Museum: el sitio donde íbamos a encontar más cosas robadas por metro cuadrado del mundo (mundial).

En cualquiera de estas dos estaciones se puede parar
para llegar al British Museum






Antes de nada que nadie se desmoralice cuando llegue al museo. Es ENORME e imposible de visitar en un solo día (menos en una hora). Pero bueno, nosotros le echamos co...raje. Nada más llegar, ea, como cualquier turistilla, a ver las momias:

Momia época pre-momificación (momificación natural en el desierto)

Momias "normales"

Momia al desnudo

Momia romana (época de dominación romana de Egipto)

Momias de gatos y de peces (el caso era momificar)


Parte alta del museo... Lejano oriente

Foto delante de la "Piedra Rosetta". Una de las cosas que más me ilusión me hicieron fue esta: la de fotografiarme al lado de ella. Mírala qué maja.


Foto bajo Ramsés II

La foto anterior necesita de una explicación: ese día jugaba españa contra rusia, y claro había que sentirse orgulloso de haber llegado hasta semifinales (hacía muchos años que no llegábamos), sobre todo porque los ingleses no habían ido al europeo, jejeje (el caso era dar por culo).


Dos monumentos


Bajo relieves de los palacios de Nínive y Nimrud (¡toma ya!)

Aunque no se vea bien, es cuneiforme









De las fotos de arriba tengo que contar unas cuantas cosas: son los frisos del partenón de Atenas. Uno de los mayores expolios cometidos por los ingleses (y mira que sacaron cosas de Egipto). El gobierno griego lleva años pidiendo la devolución de los mismos y los ingleses se escudan en que no son ni ingleses ni griegos, sino de "la humanidad". Curiosamente la forma de justificarse es que el partenón estuvo a punto de ser destruido en una guerra contra los turcos y ellos lo que hicieron fue "rescatarlo" para que no sufrieran daños. Seguro que en la segunda guerra mundial no hubiesen estado de acuerdo en mandar los frisos a Suiza por si les caía un V1 o un V2. Hipócritas.

Bueno, salimos del museo habiendo visto una mínima parte, pero ya hacía hambre, así que a buscar un sitio donde comer.

Por el camino nos encontramos con el cartel del musical del señor de los anillos. Arf... La próxima vez no se escapa.

Caminando por la calle estábamos discutiendo (en el buen sentido de la palabra) si íbamos a comer "fish and chips" u otra cosa, y una persona que pasaba por allí (parecía galés por el acento) al escucharnos nos dijo que no, que comieramos bien, que el fish 'n' chips era una mierda (literal). Le hicimos caso.

Nos metimos en un restaurante de en frente del museo británico llamado "Munchkins" (de veras) y nos sentamos para pedir. Nos atiende un camarero y nos dice: "¿Qué vais a querer?". Esto en perfecto castellano. La conversación fue tal que esta:

- Hombre, ¿qué nos recomiendas?
- Pues los huevos Benedict y el pastel de carne. El resto es una auténtica basura.
- ¿Qué lleva el pastel de carne además de carne?
- Gratinado, pan en el fondo y esa salsa negra que los ingleses le echan a todas las comidas.
- Vale pues entonces dos de huevos Benedict y un filetito para Alejandro.

Al rato...

- Lo siento, pero solo queda uno de huevos Benedict
- Vale, pues uno de huevos Benedict y uno de pastel de carne.
- Muy bien.

A todo esto que Babé me pregunta:

- ¿Cómo sabrá que somos españoles?
- ¿Será por la bandera, cariño?

Efectivamente los huevos Benedict estaban de rechupete y el pastel de carne aún teniendo el interior una apariencia asquerosa estaba bastante bueno. Fui al servicio y empecé a ver las demás comidas que había en el restaurante. Me dio tal grimilla que cuando nos fuimos dándoles las gracias al camarero (de Madrid) le dejamos hasta propina.
En el restaurante Munchkins'


Vale, pues vamos al acuario (que le hacía mucha ilusión a Alejandro).

Cruzamos el Támesis y nos metimos en el acuario de Londres. Es caro, pero si no se ha visto un acuario con Tiburones o medusas, merece la pena.













Cuando ya habíamos terminado la visita empiezan a sonar unas alarmas y a decir que abandonemos el acuario. Nos hacen meternos por unas escaleras y unas rampas para salir rápidamente del acuario (jejeje, vimos una parte que no todo el mundo ve, jejeje). Un tipo con un carrito de bebé que iba delante nuestra y en vez de abrir las puertas de forma normal iba "pateándolas", pero no en sentido figurado, si no en el real. Al salir nos dicen amablemente que si queremos volver a ver el acuario que la entrada nos vale. La verdad es que ya habíamos visto todo el acuario, así que pasamos a la siguente escala: Winston Churchill's Britain at War Experiece.

Es un museo que si bien en un principio parece caro, al final no lo es tanto porque te dan unas audio-guías que sin ellas el museo sería una puta mierda. Con las audio-guías te explican detalladamente todas las estancias donde Churchill y el gobierno británico aguantaron los embates nazis durante toda la guerra. Recomiendo que se "exprima" al máximo las opciones de la audio-guía (es decir, que cuando digan aquello de: "si quiere oir la descripción de..", aprieta el número porque merece la pena).





Aunque no se vea nada bien, es donde se colocaban las audio-guías.

También hay un museo a parte dentro de este mismo museo, dedicado a honrar a Winston Churchill. A no ser que seas un fanático británico fan acérrimo del de los puros, pasa, porque es aburrido de cojones.

Saliendo de las "Cabinet war rooms" empezamos a ver cuervos en el parque cercano. Son como gorriones (por la sinvergüenza que tienen) pero en negros y acojonan un poco más.


De aquí, nos fuimos andando hasta Picadilly Circus (una caminata durilla, advierto).



Pero todos los bares estaban copados por españoles. Así que nos fuimos a comer a un Fridays que había cerca del hotel. Un camarero gilipollas nos privó de ver el primer gol de España, casi del segundo y cuando se acercaba el camarero de nuevo, otro golito.

Había otra familia española en el fridays, pero ni mucho menos era tan escandalosa como nosotros, jejeje. Al final terminé pidiendo a los demás comensales (supongo que ingleses) un "Support Spain", y casi cantanban los "uys" igual que nosotros, jejejeje (el gol final lo cantaron bien, pero demasiado flojito para mi gusto).


Pues nada, a dormir que el día siguiente volvíamos a Sevilla con su bonito calor. Próximo capítulo de Londres: Final. Y espero ponerme con el final del viaje a Túnez que aún queda. A ver si me pongo al día.